La presente tira está basada en hechos reales... aunque evidentemente, nunca con momentos tan bizarros como la última opción de la cuarta viñeta.
Como profesor, uno de los trances más desagradables de mi oficio viene cuando un padre superado por las circunstancias me asegura que es incapaz de controlar a su hijo, de comprenderlo, etc. Siempre que ocurre esto se me hace un nudo en el estómago y, por si queréis saberlo: siempre opto por la segunda opción.
Ese conjunto de factores imposibles que se llama adolescencia puede resultar muy duro para quien lo padece, y para quien acompaña en la travesía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario